Con el aumento de las temperaturas, la vida social en la calle y una mayor duración de luz natural gracias al cambio de hora; el verano comienza a acercarse peligrosamente. Son meses en los que hay un alimento básico que nunca puede faltar, los helados. Para tener la mejor conservación, las tiendas especializadas necesitan una vitrina de helados en buen estado y que funcione a la perfección. También es un complemento perfecto para incluir en una pastelería para compensar la disminución de ventas de pasteles, tartas y dulces, en los meses de verano.
Los helados son uno de los mayores manjares que saben refrescar las tardes calurosas del verano. Como heladería tendrás que tener clara la selección de expositores que mostrar a tus clientes. De esta manera, podremos incidir en la decisión de los usuarios y ayudarles a elegir.
Una mala decisión en la elección de tu vitrina de helados hará que tu producto se eche a perder. No tendrá las mismas propiedades, se cristalizará o derretirá antes de ser consumido. Para saber qué hacer y qué aspectos seguir, en Rochina te damos una serie de recomendaciones al respecto. ¡Apunta!
Características clave para escoger tu vitrina de helados
– Tipología: lo mejor en esta ecuación es que hay mucha variedad en la elección de tus vitrinas refrigeradas de heladería. La presentación del producto es esencial, por eso debes prestar mucha atención a la forma de mostrarlo. Una opción interesante son los carros refrigerados que tienen la opción de estar en interiores como exteriores. Además, son prácticos por su capacidad móvil de llevarlo de un sitio a otro. Rochina se adapta a tu espacio, tu diseño y tu idea para darte las vitrinas que necesitas.
– Temperatura: dentro de sus características, las vitrinas refrigeradas tienen un sensor de temperatura. El rango de grados para una vitrina de helados ronda los -15ºC. Para el caso concreto de los helados, debes escoger las vitrinas con doble ventilación. Es un sistema para conservar el frío en el interior, controlando siempre y con gran exactitud la temperatura dentro de la vitrina.
– Tamaño: obviamente el tamaño es muy importante a la hora de comprar una vitrina refrigerada para helados. Lo primero es conocer bien el espacio disponible para exponer el producto. Y a raíz de ello, adquirir una vitrina adecuada a esos metros. Puesto que una demasiado grande sería un gasto de energía y dinero que puedes evitar; y una demasiado pequeña se quedaría corta para nuestras necesidades. Para ello, mide el lugar dejando un espacio libre para que el aire fluya y no tengamos problemas con la ventilación.
– Instalación: ten en cuenta que no se deben usar conexiones intermedias desde la vitrina a la red eléctrica. Enchúfala directamente y siempre con horas de antelación para a poner los helados en su interior. Tampoco la coloques cerca de fuentes de calor o de aires acondicionados ya que puede influir en su rendimiento. Deja libre la rejilla de ventilación ya que si hay una obstrucción podría llevar a la rotura del motor.
– Limpieza: cuando hablamos del mundo de la hostelería, la higiene es básica. A nadie le gusta ver una vitrina llena de suciedad que producirá rechazo en los clientes. Deben estar preparadas para desmontarse con facilidad facilitando así su limpieza. Haz este proceso cada cierto tiempo para llevar a cabo una limpieza a fondo. La cortina o cristal que separada la vitrina del trabajador estará siempre cerrada. Eso evitará que, entre calor, pero también posibles agentes que arruinen la vista de los clientes.
Cuando el calor se apodera de todos los aspectos de nuestra vida, las ventas de helado se disparan. Eso significa que puede haber una demanda, pero no se puede hacer de cualquier forma. Necesitas el asesoramiento y la profesionalidad que Rochina puede darte. ¡Confía en nosotros!