Todos sabemos que las vitrinas son de los elementos más importantes de un comercio. Da igual que sea una tienda de alimentación, pastelería, heladería, bombonería, cafetería o panadería. Tener una vitrina expositora es la forma perfecta para mostrar tus productos a la vez que se hace una barrera de seguridad. Podrás mostrarlos al público sin problemas porque no se deteriorarán.
Tener una vitrina expositora es fácil, pero hay que usarlas adecuadamente para aprovechar sus ventajas. Puede jugar a tu favor a la hora de atraer a los clientes para que consuman tus productos. Para que sepas un poco más de estas vitrinas, desde Rochina te explicamos los secretos para saber como sacarle el máximo partido. ¡Aquí los tienes!
Consejos para aprovechar tu vitrina expositora
– Escoge bien los productos: es importante escoger qué artículos vas a exponer en tus vitrinas. Éstos se transformarán en el principal reclamo de tus clientes, así que elígelos concienzudamente. Escoge piezas especiales o que quieras destacar por algún motivo concreto. Juega con las diferentes alturas y pon las más importantes a media altura para que sea más fácil verlas.
– Actualiza tu vitrina: si es una tienda de alimentos, la actualización de tu vitrina es fundamental. Aún así, intenta variarla todo lo que puedas, rotando incluso los elementos que están dentro. Tanto en diferentes alturas como añadiendo nuevos artículos. Si hay una especie de rotación, dará una sensación de estar siempre cambiando y trayendo novedades.
– Composiciones diferentes: dentro de la propia vitrina es importante que juegues con los elementos. Aprovecha para crear composiciones y vitrinas temáticas. Por ejemplo, dedicar un día al mes a un producto concreto, aprovecha artículos con temáticas en común como bombones de sabores o colores. Haz lo necesario para que éstos cuenten su propia historia.
– Aprovecha la estacionalidad: las composiciones están ligadas a la estacionalidad y fechas importantes. Para mantenerte al día, busca en el calendario esos días señalados tan comerciales. Como por ejemplo San Valentín, el Día del Padre, el Día de la Madre, verano, Navidad, Halloween… Todas tienen su propia temática y elementos visuales que puedes adaptar a casi todas las tiendas. Son una forma perfecta para renovar las vitrinas y ofrecer productos con una decoración relacionada.
– Localización en la tienda: tan importante como los productos de tu vitrina expositora, es la ubicación de la misma. De nada sirve una vitrina que está en una esquina escondida. Tienes que otorgarle un lugar especial, cerca de la caja, en la entrada, en la salida o incluso en el escaparate. Busca ese espacio para que atraiga todas las miradas de posibles clientes de manera natural. Y si quieres ir probando, apuesta por las vitrinas con ruedas que puedes mover de un sitio a otro.
Si quieres tener una vitrina expositora en tu tienda o comercio, contacta con Rochina donde nuestros expertos te asesorarán en todo lo que necesitas.